Estas son preguntas que, aunque suenan muy obvias, nos olvidamos de hacerlas después de un tiempo, si es que las hicimos en su momento. Contar con objetivos claros nos permite desglosar a detalle las tareas, actividades que los diferentes equipos o personas deberán priorizar y ejecutar en determinados periodos de tiempo, tanto individualmente como en equipo.

Definición de conceptos

Iniciemos por la definición de la misión, que se entiende como la razón de la existencia del negocio.

Por otro lado, el o los objetivos es la declaración del alcance del negocio y la expectativa de los resultados aterrizados en enunciados concretos. Una forma fácil de definir objetivos es con la metodología SMART: escalable, medible, alcanzable, realista, temporal.

Aterrizando en la práctica

Si bien los objetivos hacia adentro de la empresa son fundamentales, una definición diferenciadora es crear objetivos que se vean plasmados en los resultados de nuestros clientes.

Un ejemplo de misión diferenciadora sería “Ser la aplicación en la nube que ayude a las nuevas empresas a confiar en la transformación digital como un canal de crecimiento sostenible y rentable.”

Tomando de referencia la misión anterior, podríamos aterrizar en el siguiente ejemplo de objetivo diferenciador: Ayudar a nuestros clientes a incrementar sus ventas en un 20% en el primer año de contratación.

Podemos formular 1 o 2 objetivos generales para después desglosarlos a objetivos específicos por equipo o rol.

Por ejemplo, el rol comercial o de ventas podría fijarse como objetivo “Asegurar el ciclo de venta de cada nuevo cliente gestionando la implementación y capacitación en las primeras dos semanas de la contratación”.

Entonces el objetivo podrá desglosarse entre otros en estos indicadores de gestión:

• Prospectar clientes que saquen verdadero provecho de nuestra oferta
• Asegurar el cierre del ciclo de implementación y capacitación a clientes nuevos
• Seguimiento bimestral de clientes para dudas y necesidades

Por otro lado, para el equipo administrativo, pensemos: ¿cómo el equipo administrativo puede ayudar a nuestros clientes a incrementar sus ventas?, si bien, no es una respuesta obvia, es posible que con una sencilla pregunta a nuestros clientes al momento de cobrar como ¿has encontrado algún problema con la aplicación? puede ayudar a detectar posibles inconformidades de clientes, y a su vez incrementar el nivel de confianza en la solución.

Con este razonamiento, un objetivo para el equipo administrativo sería Garantizar la confianza del cliente, y algunos de los indicadores a medir para el equipo serían:

• Pagos hechos a tiempo por clientes
• Índice de satisfacción de cliente

Como verás, hay dos indicadores en ambos departamentos que se complementan, y esto es justamente lo que impulsa a las compañías a crecer exponencialmente.

Adicional a eso, es importante que de vez en cuando hagamos una revisión de nuestras actividades diarias y cuestionemos aquellas actividades rutinarias que nos quitan mucho tiempo del día, organizando nuestros tiempos definiendo días y horas para las distintas actividades. Una vez definido lo anterior, es importante elegir herramientas que hagan el trabajo más eficiente.

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